sábado, 5 de enero de 2008

Amor de salón

Paranoica milonga de dos
laboriosa combinación
entre escalones de sexo y
compás de bandoneón
zurciendo el deseo por el cuerpo
y en el piso del salón.

El copia sus ojos
esos ojos de taller
donde el amor se moldea
en esa anárquica sin razón
que la gobierna.

Milonga raspera
color del teñido vino
que después de tanto danzar
entre la copa y la lengua
rompe en un descuido con
la pasión expuesta entre
reveses de farolitos.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Asi debe ser la poesia, como medio de expresión escrita, es otra manera de mostrar lo que somos , lo que sentimos y lo que pensamos. Porque manifestamos la existencia y la belleza del mundo al cual pertenecemos. Permite comunicarnos en cierta forma sin estar en contacto fisico, pero que en la lejania del tiempo y el espacio nos permite estar lo más cerca posible.

Alfredo Piccolotto dijo...

La sensualidad bailada con la pluma en 2por4 y en piso de parqué. Podrían colgar de las paredes unas tulipas amarillas.
Muy bueno.
Perx